Elaboración

1. Pelar los dientes de ajo y filetear.
2. Verter el aceite en una cazuela amplia y poco profunda. Cuando esté caliente, bajar el fuego e incorporar los ajos. Remover con frecuencia para que no se peguen. Retirar a un plato cuando estén dorados y reservar.
3. En ese mismo aceite, saltear la guindilla previamente cortada en rodajitas. Reservar.
4. Dejar templar el aceite y colocar los trozos de bacalao con la piel hacia arriba. Cocinar a fuego bajo removiendo la cazuela con movimientos circulares para que el aceite y la grasa que suelta el bacalao vaya emulsionando y quede una salsa espesa.
5. Cocinar los trozos de bacalao durante 3-4 minutos por cada lado en función de la altura de los trozos.
6. Colocar cada trozo de bacalao en un plato y encima los ajos dorados y la guindilla.